En medio de la controversia sobre las emisiones de ondas electromagnéticas, Apple ha tomado una decisión en relación al iPhone 12 en Francia. El gigante tecnológico ha anunciado una actualización del sistema operativo para adecuarse a los estándares franceses después de que las autoridades de ese país ordenaran la retirada del producto del mercado.
El anuncio fue respaldado por el ministro delegado francés para temas digitales, Jean-Noël Barrot, quien confirmó que Apple se comprometió a implementar la actualización en los próximos días.
Esta no es una situación aislada. Bélgica y Alemania están considerando acciones similares, aunque no se vislumbra una prohibición en toda Europa por el momento.
La Organización de Consumidores y Usuarios de España ha pedido una evaluación similar en su país. Según sus resultados, los límites de emisión se exceden solo en las mediciones extremas, y los estándares de seguridad de la Unión Europea son considerablemente más bajos que los requeridos para causar un aumento de temperatura significativo.
Apple, que inicialmente cuestionó las conclusiones de la agencia francesa, ha accedido finalmente a llevar a cabo la actualización, a pesar de mantener su postura de que el iPhone 12 cumple con los estándares internacionales.
En el contexto global, la Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene que no hay evidencia de peligro por exposición a campos electromagnéticos de baja intensidad para la salud humana.